5.11.2005

warhol



Mañana vuelvo a ir a París. Iré a presentar el examen y el proyecto del curso de bases de datos, y luego seré libre. Libre, como el viento, como el mar. Claro, lo mejor de todo es que me veré con Olga. Eso me tiene realmente contento.
En días pasados, siguiendo algunos de los buenos consejos turísticos de cavorito terminé viendo una exposición de Warhol en el MOCA. Nada del otro mundo, creí en ese momento. Miles de fotos, miles de modelos, Mao, muchos videos musicales, muchas películas, the same old shit. Nada del otro mundo, me dije. Pero al final la reflexión sobre lo efímero me tomo el resto del día. No sé si ahí hay algo de arte, es decir, en la causa de la reacción.
Tomé varias fotos (por instinto, de manera furtiva). Y después una guía le gritaba a un pobre japonés (bueno, no creo que fuera pobre si era japonés, igual no estoy seguro de que fuera japonés) que no se podían tomar fotos. Bueno.

Continuo en el stage. Leo, pienso, leo, pienso, programo, leo, me desilusiono, leo, y así.

A final de mes pasaré una semana en Trieste, viendo a los pesos pesados de la cosmología computacional. Viendo a todos los que escriben los papers que leo ahora, y todavía no sé si debería insultar a alguno de ellos. Lo que si tengo es curiosidad de ver si una de ellas es tan bonita en persona como se ve en su home page.